Deshabitada y con una descomunal deuda pública, Detroit se colapsa.
8 ciudades más en EEUU están en la misma situación.
El emblemático poderío económico e industrial de Detroit, en los Estados Unidos, no es ahora más que un recuerdo lejano. La capital del estado de Míchigan ha pasado a ser ciudad en quiebra o casi un pueblo fantasma, porque de los dos millones de personas que la habitaban en 1950 ahora no le quedan ni 700.000. Huye la gente y huyen las empresas; el desempleo se eleva a 18 por ciento, y su deuda rebasa los 18.500 millones de dólares.
Visto en Periodismo Alternativo